Entradas

Mostrando entradas de enero, 2012

Hoja de vida

Estoy pateando lata, una lata sonora y hueca que hace eco hasta el final de la calle. Y esto es incoherente con la cantidad de oportunidades laborales que se me presentan, casi siempre por los buenos amigos que hacen de mi agencia de empleo y que me pasan la voz y me dicen César por aquí hay un archivo, César por aquí una biblioteca, César por aquí una chambita que no te debes perder. Y yo preparo mi mejor floro frente a un espejo, acomodo y reacomodo mi hoja de vida, me pongo bien tiza, intento llegar temprano a las entrevistas —nunca llego temprano—; pero nada tiene resultado. Tal vez ya no deba ponerme exquisito con los empleos. Hoy un amigo me llamó muy animado, me habló de un puesto en un archivo en un simpático Ministerio; sin embargo el trabajo me quedaba a dos horas de casa, a tiempo completo empezando desde las 8:00 am, y con un sueldo debajo de lo normal. Lo tuve que rechazar. Paciencia. Paciencia. Gracias a Dios todavía soy un muchacho. Si fuera un jefe de familia hace rato